Cuando el pueblo jugó a ser Papá Dios

   Querid@s lectores/as:   Demos ahora un variopinto recorrido por lo más ocurrente y original de nuestra toponimia, a través de nuestra querida (¡y sufrida!) Isla de la mano de este librito. Determinados nombretes poblacionales dibujarán en nuestro rostro una sonrisa... otros pueden provocar incluso una carcajada. ¡Así somos de ocurrentes! ¡¡Pasen y lean!!

CUANDO EL PUEBLO JUGÓ A SER PAPÁ DIOS
(un bojeo a la toponimia cubana) 
Argelio Santiesteban

Ediciones Unión
La Habana, Cuba. 2011
45 páginas + Bibliografía

-Resumen de la contracubierta del libro-

   Para nombrar los detalles de su paisaje circundante  -fuese calzada, colina, península o desfiladero- la gente no esperó por gubernamentales edictos del consistorio sino que, según dijo el historiador Emilio Roig de Leuchsenring, al pueblo le bastó "el encanto, el atractivo y el interés folklórico de estos nombres que rememoran hechos menudos o trascendentales de la vida de una población, o sus tradiciones y leyendas".
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Ser bueno es el único modo de ser dichoso.
Ser culto es el único modo de ser libre.

       José Martí
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