Teoría y práctica de La Habana

     Queridos lectores/as:  Por aquí sigo, fiel a mi cita semanal. Mi acostumbrada 'busca y captura de libros cubanos de los viernes' permanece en su trayectoria, pero por cuestiones laborales me veo condicionado a trasladar la obra seleccionada y mostrársela en mi "Biblioteca/blog" el sábado. 

   Puedo asegurarles  -tras su lectura-  que la pieza conseguida esta semana es mucho más interesante de lo que creía en un principio. Dentro del ámbito en un principio cultural, digamos que nos muestra una forma distinta de ver, vivir y andar La Habana y más...  a través de las vivencias reales de su autor. Les recomiendo acompañarlo en este sorprendente periplo habanero... ¡pasando y leyendo!

TEORÍA Y PRÁCTICA DE LA HABANA

-Crónicas-

Rubén Gallo

Jus, Libreros y Editores S.A. de C.V.

Ciudad de México

Primera edición: julio de 2017

ISBN: 978-607-9409-82-1

288 páginas.

-De la contracubierta del libro-

   La Habana, señores, es un delirio alojado en un torbellino envuelto en mil paradojas. La Habana es indefinible: sólo se puede mostrar. Y eso hace este libro, un estallido no menos descomunal que el escenario de sus peripecias.

   Un gran espejo.  Muestra, por ejemplo, bares gays regentados por probos funcionarios de la revolución incorrupta, lactófagos consternados que deambulan por las calles en busca de leche liquida, ritos africanos que consagran los dogmas de la Santa Madre Iglesia (y las incontinencias locales), automóviles privados al servicio del transporte público para uso y disfrute de quienes se abren a las aventuras inesperadas o desesperadas, un cabaret en decadencia desde la irrupción del hombre nuevo que ahora rinde culto a la profesión (masculina) más antigua del mundo, una librería antes clandestina reconvertida en centro cultural de lenocinio y refugio de perros peregrinos, aquel 17 de diciembre en que David y Goliat restablecieron sus relaciones diplomáticas tras cinco décadas de relaciones problemáticas, aquel 25 de noviembre en que murió el eterno Comandante...  

   Los protagonistas de esta crónica son poetas y rufianes, pintores y jineteros, santos pecadores y crápulas angelicales:  son la materia humana de una ciudad incandescente.

   Todo esto ocurre a lo largo de los seis meses febriles que el autor pasó en la isla durante el año 2015. Un teórico arrojado a la práctica.  Vio, vivió y registró lo que vivía con una prosa tan inflamada, tan generosa, como el espectáculo que retrata. La Cuba en tránsito hacia nadie sabe dónde, ha encontrado por fin el texto que buscaba.

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Ser bueno es el único modo de ser dichoso.

Ser culto es el único modo de ser libre.

       José Martí

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