sábado, 19 de noviembre de 2022

Estación central

 



   Queridos lectores/as:  Por aquí seguimos, en esta segunda entrega dedicada a los autores y libros cubanos raros, y por ello algunos bastante desconocidos, cuando no debería ser así. 
   Hoy vamos a dedicar este espacio a Miguel Collazo, un autor que en cierto modo podría ser considerado uno de los precursores de la ciencia-ficción cubana, aunque en su escasa pero peculiar producción cultivó muy disimiles géneros.  
   Antes de reflejar el libro que nos atañe, veamos esta síntesis Bio-bibliográfica:

   Miguel Collazo, escritor y artista plástico cubano (La Habana, 28 de octubre de 1936 - agosto de 1999).  Uno de los primeros grandes exponentes de la ciencia ficción cubana, reconocido también por cultivar una literatura que rozó diversos matices como el horror, el costumbrismo, el realismo y la fantasía.
   Tiene una obra literaria escasa, original y de difícil clasificación. Debido a la gran cantidad de géneros y temas que cultivó, muchos de ellos híbridos (ciencia ficción humorística, simbolismo lírico, costumbrismo criollo) se le ha clasificado como un "raro" de la literatura cubana. Dejó un legado literario escaso, pero muy importante en la actualidad, que muchos siguen:

     - El libro fantástico de Oaj (1966)
     - El viaje (1968)
     - Onoloria (1971)
     - El arco de Belén ((1975)
     - Estancias ((1985)
     - Estación central (1993)
     - Dulces delirios (1996)
     - El hilo del ovillo (1998)

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   Se suicidó en La Habana, en 1999, clavándose una aguja en el corazón.

   Aquí está la entrega de hoy. Un libro sorprendente. Inclasificable. Sólo puedo decirles que pasen y lean: 

ESTACIÓN CENTRAL
Miguel Collazo

Editorial Letras Cubanas, 1993
ISBN: 959-10-0083-9
261 páginas.

-De la contracubierta del libro-

   Dos personajes protagónicos, dos recorridos por La Habana que se inician en un tiempo casi exacto. Ray tomará el tranvía hacia casa de su amante; Balbuena caminará junto a su increíble interlocutor, un perro sarnoso, en busca de la ayuda de Bebo López.
   La novela se desarrolla siguiendo estos trayectos, con la eficiente conjugación de recursos literarios, entre los que se encuentran la retrospectiva, la introspección, el soliloquio, con los cuales no sólo penetramos en la vida de estos hombres, sino también en la época difícil  -año 1947, segundo mandato de Grau San Martín-  por la que transita la República.
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Ser bueno es el único modo de ser dichoso.
Ser culto es el único modo de ser libre.

       José Martí
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Ser bueno es el único modo de ser dichoso.
Ser culto es el único modo de ser libre.

       José Martí
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