jueves, 25 de febrero de 2010

Cita en el Azul profundo


Volvamos a hablar de Roberto Ampuero porque la obra de ese escitor lo merece.

Para mi es un gustazo cuando -además de que el tema en sí, me interese- me empato con uno de esos ESCRITORES que SI saben escribir.
Este es, felizmente, el caso de Roberto Ampuero.
Ayer mismo finalicé su libro (cuya referencia dió inicio a este post) "Halcones de la noche"... y quedé tan satifactoriamente impresionado que sentí la imperiosa necesidad de sali corriendo a la librería adquirir un libro del mismo autor (...que el día anterior dejé de lado). Y ¡¡ya lo estoy empezando a leer!!.
Aquí lo tienen ¡no se lo pierdan! ¡¡pasen y lean!!

CITA EN EL AZUL PROFUNDO
Roberto Ampuero

Ediciones Verticales
Grupo Editoril Norma
Barcelona, España.
Primera edición: junio de 2009
407 páginas

'Delenda est Australopitecus'... Con esta frase como única pista, el detective Cayetano Brulé inicia la investigación más extraña a la que se ha enfrentado. Y no por que las pesquisas le lleven desde Valparaíso a Estocolomo, La Habana y Cancún, sino porque su cliente ya está muerto.

Antes de que Agustín Lecuona pueda encargarle a Cayetano la investigación, Lecuona es acribillado a balazos ante las naices del detective en el Azul Profundo, un restaurante de Santiago de Chile en el que el cliente recien asesinado le habñia citado para explicarle para qué le ha contactado.
De regreso en su oficina, Cayetano recibe un sobre que contiene un breve mensaje de Lecuona con una única pista y un generoso cheque como adelanto por el trabajo. Así pues, Cayetano se considera contratado, aunque no para el m isterioso encargo que no llegó a conocer sino para encontrar al asesino de su cliente.

--------------------------------------------------------------------------------
Última Edición por Barbarito; 03-jul-2009 a las 14:45 Razón: Corrección tipográfica

--------------------------------------------------------------------------------

Ser culto es el único modo de ser libre. Ser bueno es el único modo de ser dichoso.
J. Martí

No hay comentarios: